domingo, 6 de diciembre de 2015

Hasta Robarte La Calma

   Te escribo

   porque necesito reencontrarme con tu ser
   a través de tu mirada,

porque sé...

   que en cada letra oculta te abrazaré con mi alma,
   palpitante y desbocada,
   que se ahoga en este mar de palabras, decidida hacia tu pecho
   donde entrará sin necesidad de que le abras,

apretándote enternecida...

                                              hasta robarte la calma.


© Lucía Navarro Luna


Reír

Hoy quiero reír
y que rías a mi lado,
soñar despierta
mientras me aprietan tus brazos,
abrazarte el tobillo
sintiendo tu corazón.

Hoy quiero reír...

lo necesito, Amor.

© Lucía Navarro Luna




                                                                                                                     




Nous Vents De Sonall (Nuevos Vientos de Sonajero)

A Raul Navarro Luna, el meu germà. Pare i futur papi


Nous vents s’aproximen.
Brisa nova ens envolta
amb soroll de sonall i regust de biberó.
M’encisa escoltar als records
quan em duen la teua careta bonica,
arrodonida i innocent,
lluitant contra la vida.

M’agrada pensar, quan ningú mira,
que estàs en pau, per fi, amb ella.
Que el teu cor desborda de serenitat
i et plau cada matí
en aquest mon de falç i corbella.

Pardalet suau que, dolç, li cantes al amor

donant vida a eixe ocellet que ja sembla que trina
per volar directe als teus braços,
braços d’aquell xiquet que avui es pare.

Eixe Sol que ja s’arrima.


© Lucía Navarro Luna





(Traducción: NUEVOS VIENTOS DE SONAJERO. 

  Nuevos vientos se aproximan. Brisa nueva nos envuelve con sonido de sonajero y sabor de biberón. Me fascina escuchar a los recuerdos cuando me traen tu carita bonita, redondita e inocente, luchando contra la vida.
  Me gusta pensar, cuando nadie mira, que estás en paz, por fin, con ella. Que tu corazón desborda de serenidad y te place cada mañana en este mundo de hoz.
  Pajarito suave que, dulce, le cantas al amor, dando vida a ese pajarito que ya parece que trina para volar directo a tus brazos, brazos de aquel niño que hoy es padre. Ese Sol que ya llega).










Arbre Meu, Arbre Nostre (Árbol Mío, Árbol Nuestro)

Als meus avantpassats

Pilars estimats,
a alguns no vos recorde,
a altres... mai no vos he vist.
I sou el meu principi,
la meua font, el meu sostre.
Els vostres ulls han regat
el bressol en el que ara hi jugue,
el etern jardí d’infants
que al caliu dels nostres llars
ha estat el meu refugi.

Els vostres mots han foradat
la pedra que em deia: ‘tu no hi passes’;
Estic ací,
al mateix lloc
on ahir passejaveu vosaltres
desafiant a les roques.

Cada paraula no escoltada
sembla avuí gravada a foc
ací dintre,
la note com un ‘volgués que hagués sigut’,
un ‘És’ i un ‘som’,
que s’atropellen rere els vidres de les portes.

Som camins entrecreuats,
som llavor i el brot d’un arbre,
provocador d’allò llògic,
d’ànimes en color, però sense rostre.

Ens hem retrobat
dintre de l’arbre genealògic.

Arbre meu... arbre nostre.

Estimats daurats,
fills d’altres èpoques,
la societat –avuí– se’ns vol engolir
mentre ens arrosseguem igual
que un deshidratat canirostre.
Ignore què cosa em diríeu,
i no vos ho preguntaré;
prou heu fet bressolant-me fins ací.

Serà la meua actitut
qui desafiarà les meues forces.

© Lucía Navarro Luna


(Traducción: ÁRBOL MÍO, ÁRBOL NUESTRO. A MIS ANTEPASADOS.

  Pilares queridos, a algunos no os recuerdo, a otros... nunca os he visto. Y sois mi principio, mi fuente, mi techo.
  Vuestros ojos han regado la cuna en la que juego, el eterno jardín infantil que, al calor de nuestros hogares, ha sido mi refugio.
  Vuestras palabras han agujereado la piedra que me decía: ‘tú no pasas’;
 Estoy aquí, en el mismo lugar donde ayer paseabais vosotros desafiando a las rocas.
  Cada palabra no escuchada parece hoy grabada a fuego aquí dentro, la noto como un ‘quisiera que hubiese sido’, un ‘es’ y un ‘somos’, que se atropellan tras los vidrios de las puertas.
  Somos caminos entrecruzados, somos semilla y el germinar de un árbol, provocador de aquello lógico, de almas en color pero sin rostro.
  Nos hemos reencontrado dentro del árbol genealógico.
 Árbol mío... árbol nuestro.
  Estimados dorados, hijos de otras épocas, la sociedad –hoy– se nos quiere tragar mientras nos arrastramos igual que un deshidratado canirostro. Ignoro qué me diríais, y no os lo preguntaré; bastante habéis hecho acunándome hasta aquí.
  Será mi actitud quien desafiará a mis fuerzas).

martes, 6 de octubre de 2015

Confesando

Clavados en su propio deseo
se funden sin tregua, cobijados por la noche,
destruyéndose... en el húmedo recuerdo por el día.
Deslizándose contra el ventanal,
con el tanga enredado entre los dedos,
Ella vibra por tocarle,
vestido o desnudo,
dormido o despierto,
resbalando entre sus muslos
un deseo febril,
                     arrebatador y fiero.
Él lo percibe intensamente,
mientras muere vehemente
por desasirse de sus feligresas
de la misa de las ocho
o arrancarla a mordiscos de su mente.
Lo nota en el botón del pantalón,
que ha enloquecido a traición,
abrasándolo en su propio fuego.


Balbucea incoherencias,
se lo aprecian las parroquianas del primer banco,
cree verla en cada una de ellas
aunque ya no acude a las liturgias
desde que comparten confesionario.
Justo en eso está pensando
y la lascivia la devora,
''la última vez'', se jura otra noche,
aun sabiendo que se ahogará si Él no la toca.
''La última vez'', se hace eco Él
mientras recita un pasaje de Mateo,
sabiéndose extraviado sin esos pezones erectos,
sabiéndose hombre perdido
por un confesionario de gemidos,
de estallidos, de éxtasis y de truenos.



© Lucía Navarro Luna

martes, 22 de septiembre de 2015

sábado, 19 de septiembre de 2015

Maestro (En Rima Jotabe)


Al Cachorro, de Xàtiva


Con un lacerante dolor ancestro,
golpeándome el abdomen me muestro.

Aquí estoy. Temblor frío al caminar.
En pie. Tan sólo por verte pasar...
Lo necesito. Tú me haces bailar...
Necesito la saeta al cantar.

Llena el Alma, Maestro, siempre fiel.
Ved al pasar cómo me arde la piel.

No puedo yo cantar... Ni Quiero... Al Maestro
del Madero... sino al Jesús del mar.
Donde tú estás sólo veo miel.


® Lucía Navarro Luna




lunes, 14 de septiembre de 2015

A Aquells Estius

A Sergio Navarro Oltra

Sota aquesta nova llum, trepitjant en peu ferm
em tremola el cor de nou
sentint que recupere l’essència de qui sempre vaig ser
i no ho sabia:
una xiqueta impressionable,
una dona amb les emocions florides.

Les fulles de tardor d’aquest capvespre
em tornen a l’aigua d’aquells estius,
a la caseta, a ca els tios, a la dels iaios,
als collars de gessamí, al seu perfum.
A la fragància dels cassettes,
a aquell plàstic musical, infantil, adolescent...
als jocs i a la màgia de saber que estabes allí,
amb mi,
compartint eixa essència teua tan única,
que tantes vegades m’ha fet somriure
als meus passejos sola redreçant el meu camí.

Somniava que et quedaves ací per sempre,
em faltaves, malgrat que no ho saberes,
i sonric sense adonar-me una altra vegada
al pensar en Marga, en Hug i en Max,
raó i sentit de tantes coses ben fetes.

Ets un home ric.

De vegades torne allí, cosí.
Quan ja no sé estar ací,
quan el present m’ofega a la gola,
cluque els ulls i torne allí,
on la màgia tot ho podia
i m’envolcalla de nou el caliu
que et torna un roure quan l’abraces,
torne a sentir-me part d’un tot
tal com quan la terra, als peus nus,
et torna a les arrels oblidades per tant de soroll.

En aquest món de estreles i llums
torne a valorar la profunditat del silenci,
i la màgia que fa possible que coincidim cada nit
sota la mateixa lluna.

I el millor de tot, cosí,
obric els ulls... i sent que et tinc.

® Lucía Navarro Luna



(Traducción: A AQUELLOS VERANOS

  Bajo esta nueva luz, pisando con pie firme, me tiembla el corazón de nuevo sintiendo que recupero la esencia de quien siempre he sido y no lo sabía: una niña impresionable, una mujer con las emociones a flor de piel.
  Las hojas de otoño de esta tarde me devuelven al agua de aquellos veranos, a la caseta, a casa de los tíos, a la de los iaios, a los collares de jazmín, a su perfume. A la fragancia de los cassettes, a aquel plástico musical, infantil, adolescente... a los juegos y a la magia de saber que estabas allí, conmigo, compartiendo esa esencia tuya tan única, que tantas veces me ha hecho sonreír en mis paseos sola enderezando mi camino.
  Soñaba que te quedabas aquí para siempre, me faltabas, aunque no lo supieses, y sonrío sin darme cuenta otra vez al pensar en Marga, en Hug y en Max, razón y sentido de tantas cosas bien hechas.
  Eres rico.
 A veces vuelvo allí, primo. Cuando ya no sé estar aquí, cuando el presente me ahoga en la garganta, cierro los ojos y vuelvo allí, donde la magia todo lo podía y me envuelve de nuevo el calor que te devuelve un roble cuando lo abrazas, vuelvo a sentirme parte de un todo tal como cuando la tierra, en los pies desnudos, te retorna a las raíces olvidadas por tanto ruído.
  En este mundo de estrellas y luces valoro de nuevo la profundidad del silencio, y la magia que hace posible que coincidamos cada noche bajo la misma luna.
  Y el mejor de todo, primo, abro los ojos... y siento que te tengo).



Imagen: Pintura de Vladimir Volegov, pintor ruso

jueves, 10 de septiembre de 2015

Te Escribo

Te escribo porque necesito sentir
el fuego encendido que provocas en mí sin darte cuenta,
arrebatadores sueños, que se confunden con nuestra realidad,
poco o nada cándidos,
esa fuerza perturbadora que me aprieta
      ...dura... lentamente...
opresora de estas entrañas
que me ahogan en la garganta,
buscando en mi locura cómo llegar a tus labios.

Te escribo porque es mi forma de estar a tu lado,
de acariciarte el cabello,
de derretirme con tu sonrisa,
de vibrar como en una ‘mascletà’
acunada por el timbre de tu música,
esos sonidos guturales que me arrancan el corazón
a mordiscos desbocados.

Te escribo...
       y no sé ya si te amo,
o he perdido del todo el sentido
al caer por el precipicio de esos ojos,
faros apasionados e inclementes,
guías de un camino ya marcado.

Porque soy tan tuya que a este jilguero
la libertad se la dan tus brazos,
y las alas me crecen
sólo si me guardas entre tus manos.

Te escribo porque es mi manera de estar contigo,
de vivir sin tu pecho,
en este vuelo nocturno,
                         hasta alcazar tus labios.


® Lucía Navarro Luna




Imagen: Pintura de Mujer en Jardín, 
de Vicente Romero.

sábado, 5 de septiembre de 2015

Mujer De Espejo Entero

A Salomé Campayo Piqueras


Mujer de espejo entero
que te vistes por los pies,
abrazada por un dolor
que te muerde las entrañas,
te asoma por el ventanal
de esas preciosas pestañas
que gestionan las lágrimas
que se te atraviesan en la garganta
sin saber ya muy bien si son de mañana,
         de hoy o de ayer.

Inteligencia hecha mujer
de belleza reversible,
propietaria de una Alma
                      impresionable y sensible,
dueña de una coraza
                       revestida de porcelana,
una armadura... oxidada,
que se desprende con cuidado
            ...poco a poco...
puedo verla resbalar por
                        tus mejillas encarnadas.

Puedo verla perder forma,
           puedo verte ganar fuerza.

Aprecio... la linda persona
                y la fuerte mujer
que me sonríe cuando me hablas,
que brilla
              aun cuando te apagas,
que me acompaña
                        cuando te sientes sola,
que me abraza,
                aun sufriéndose desamparada.

   Que te quiero, Amiga.
  Y albergo la esperanza
de que algún día tú puedas
      sentir cuánto vales,
            cuánto eres,
             cuánto das,

aunque los tasadores no entiendan

        de joyería
                           de gama alta

       ni de sueños por estrenar.





® Lucía Navarro Luna



Pintura: 'Mujer frente al espejo', de Marino Chanlatte

lunes, 29 de junio de 2015

Precio


No he sabido acompañarte
en tu dolor taciturno,
en la ciénaga que adormila
tus pensamientos más oscuros.

Y el precio es vagar sin rumbo,
                  perdida y aniquilada,
vagando dentro de mi alma sombría
en esta noche que no escampa.
Que se quedó prendida de mi cuello,
y en un abrazo me apartó del camino
¿o ya me hallaba fuera?,
a la sombra gris
de un viento peregrino.

Extraño tus manías,
tus reproches y tus credos.

Extraño tu mirada...
que se pierde entre mis dedos.

  ® Lucía Navarro Luna


Quédate Conmigo Esta Noche


Quédate conmigo esta noche,
empapa la húmeda piel
con la marca de tus labios.
Que no sepa si suben o descienden.

Hazme sentir perdida en tus brazos encontrados
al vaivén acunador de una infancia reencontrada
en el bosque escondido de tus ojos,

mientras tus manos desnudas
me desvisten el alma
de ropajes absurdos, de gemidos robados,
de caricias de olvido y de fuerzas desgarradas.

No hables, no susurres, no digas que me quieres.

                    Sólo ven...

Quédate conmigo esta noche
                                          y te haré olvidar de donde vienes. 

 ® Lucía Navarro Luna





martes, 23 de junio de 2015

Solo Soy Si Vos Me Miráis

Calmadme, ¡oh sí! por piedad,
penetrad en este fuego
que vil me arrasa, os lo ruego,
las entrañas de ansiedad.

Aplacad esta honda herida
que enardece aquí en el pecho
descendiendo... hacia mi lecho
con mano fuerte y curtida.

 Perdida estoy si viráis,
vuestro cuerpo es el lugar
en el que encuentro mi hogar.
Sólo soy si me miráis.

Que somos dos olvidar...
ansío, atadme sin lazos
por ceder a vuestros brazos
y en vos poder descansar.


® Lucía Navarro Luna






Delirio

Me dicen que deliro...
¿Es delirio, a caso,
mirarme en la luna y ver
tus pupilas prendidas en fuego?
¿Deliro, por ventura,
porque son tus piernas las que me acunan
y tu voz besa mis labios
cuando cierro los ojos
y compartimos
la inmensidad del mismo firmamento?
Me dicen que deliro...
¿Que dirían, entonces, si sintiesen
el agudo infierno de un segundo
en un mundo
donde tú no existieses?


® Lucía Navarro Luna



lunes, 22 de junio de 2015

Estrenar... Conmigo

Soy la mujer de los amaneceres rotos
que en tus manos descansaba,
las pupilas encendidas...
las mejillas encarnadas.

Mujer escrita en tus hojas
manchadas con la tinta prohibida
que morías por estrenar... conmigo...
cada madrugada.

Mujer descrita, vendida y robada.

Mujer por unos brazos inflamados
                                 ...tus brazos...

Amada en un susurro...
Soñada en una mirada...
Dueña sin tiempo de tus noches reservadas.

® Lucía Navarro Luna


viernes, 5 de junio de 2015

Noche Sin Luna

 Yo lo amaba
y acaso él también me quiso.

Lo vi quedarse, aquella noche,
por donde no vuelven las flores,
escapando del invierno
que cosía sus entrañas,

y en un gesto delirante
me alzó por la barbilla,
me miró a los ojos
y me dijo, a media luz,
lo que sus labios jamás pronunciaran.

Ni sus brazos me rozaron
ni mis pies tocaron suelo.

No hubo tiempo.

El billete que esa tarde
me tomase al otro mundo,
me acunó entre sus ciclos
y venciome el último sueño.

Yo lo amaba
y en la profunda oscuridad
de aquella noche sin luna,
el campanario resonó mientras sus ojos
refulgían de agonía.

La señal que tanto tiempo
rogué, pedí y me deshizo
me dejó con la duda
de que acaso él... sí,

            ...acaso él también me quiso.


® Lucía Navarro Luna

Creí Haberte Encontrado

Si pudiera pedir un deseo
te arrancaría de mi corazón,
volaría a otros tiempos
volaría... hacia el Amor.
Cerraría los ojos
y en una ráfaga de polvo de estrellas
volvería a ese momento,
justo un segundo antes de que entrases en mi vida,
giraría sobre mis pasos
y cerraría la puerta.

Me deleita que seas feliz,
o pensar que tal vez lo seas,
no obstante
que te hayas olvidado de mí
como si jamás hubiese sido nadie
es un guantazo sin guantes
y con la palma abierta.

Me dueles.
Y me mata que te vayas
sin siquiera haber estado.
Me dueles.
Y necesito un respiro
para este corazón sacudido y golpeado.
Vete si quieres,
pero no te quedes
donde puedas hacer daño.
Si te vas vete del todo,
permíteme olvidar que creí haberte encontrado.

® Lucía Navarro Luna




miércoles, 3 de junio de 2015

Aquellos Instantes

Pensando en ti...
            y en las noches que no fueron,
las lunas repetidas,
y las estrellas... que... cansadas...
rasgaron el cielo.

Me permito pensar en ti
un instante... de nuevo...
y me inunda el chocolate,
me acaricia un soplo de aire
que me sabe a caramelo.

Extraño tanto esos momentos...
que siento un beso desgarrarse,
y al contemplar tu imagen en el recuerdo,
el frío viento golpea contra el estante.

No eres tú a quien anhelo,
  son...
        aquellos instantes.


® Lucía Navarro Luna

domingo, 17 de mayo de 2015

LUZ MARI... ES AMOR

Tiemblo de emoción
Recordando cada imagen
A la luz del cariño
Significativo de los míos.

Parte de mi Alma ha quedado
Unida a la vuestra, oh queridos míos,
En este amanecer
Nuevo para mí, que acaricia
Tecla a tecla,
Esta Alma que vibra al viento.

Días de lágrimas difíciles,
Emociones capturadas en cada

Fibra de mi Ser,
Ungidas por la tintura de mi estilete
En la inmaculada superficie de un papel
Gotean ahora sin tiempo
Ondeando en versos para ti.

Las primeras letras de este poema
Ligan un mensaje,
El mensaje que ha llevado este libro hasta ti.
Gateando aún y entre pañales, suspiro
Al cielo porque este proyecto te haga sonreír.

Logrado un primer objetivo
Uso pluma y tinta
Zarandeándome el corazón,

Marcando la hoja sin vida
A la luz de esta caricia
Robándole destellos con mi fuego e
Ignorando a la razón.

Enternecida, olvidada,
Sangrante, profundamente amada,

Abandonada sin remedio,
Mortificada por amor, cruel con mi caballero.
Ofensiva contra el mundo y abnegada amante.
Rozar el cielo contigo... es mi siguiente objetivo.

® Lucía Navarro Luna



Bienvenidos a Casa

13 de Mayo de 2015, a las 16:00h...

Bienvenidos a Casa





domingo, 3 de mayo de 2015

El Cel Als Teus Braços (El Cielo En Tus Brazos)

A Rita Navarro Luna

Sé que t’has preguntat,
moltes vegades...
angoixada...
si estaries fen-t’ho bé.
Sé també que el teu cor
desbordat de tendresa,
i de pau,
quan la veus dormir,
tan forta i tan fràgil al temps,
aguantant la respiració
per poder gaudir de la seua,
escoltant el suau ronquit d’ell
a l’altre costat de la porta,
s’ompli d’una sort d’anhels
que no saps com definir.
Que hui ets tu la que es pregunta
com seran demà,
la que s’envolta de pànic
de pensar que un dia creixeran,
deixaran de ser com son ara:
el teu xiquet pelut i ta nineta rossa,
de no poder aturar el temps
en una eternitat al teu favor
i seguir mirant-te en eixos ullets,
al temps que dessitges veure’ls ja
en la seua llum front a tu, sent ells qui t’abracen
a l’alçada del teu cor.

Mentres un àngel, des d’ací,
et veu somriure quan penses que no,
quan creus tenir eixa estoneta de Cel
per a tu sola.

És la mirada d’ell...
  és el somriure d’ella...
   qui et poden dir que tal ho estàs fent;
    quan, jugant amb ells a la gespa i en la brossa,
la teua càlida mirada en ells es posa.

Des d’ací sols puc dir-te una cosa:
  tal com jo ho veig...
  basant-me en tu...
  i veient-los a ells..
ets una mare meravellosa.

(Traducción: EL CIELO EN TUS BRAZOS
Sé que te has preguntado, muchas veces... angustiada... si estarías haciéndolo bien.
 Sé también que tu corazón desbordado de ternura, y de paz, cuando la ves dormir, tan fuerte y frágil al tiempo, aguantando la respiración para poder disfrutar de la suya, escuchando el suave ronquido de él al otro lado de la puerta, se llena de una suerte de anhelos que no sabes como definir.
 Que hoy eres tú la que se pregunta cómo serán mañana, la que se envuelve de pánico de pensar que un día crecerán, dejarán de ser como son ahora: tu niño peludo y tu muñequita rubia, de no poder parar el tiempo en una eternidad a tu favor y seguir mirándote en esos ojitos, al tiempo que deseas verlos ya con su luz frente a ti, siendo ellos quienes te abracen a la altura de tu corazón.
  Mientras un ángel, desde aquí, te ve sonreír cuando piensas que no, cuando crees tener ese ratito de Cielo para ti sola.
  Es la mirada de él... es la sonrisa de ella... quienes te pueden decir qué tal lo estás haciendo; cuando, jugando con ellos en el césped y en la hierba, tu cálida mirada en ellos se posa.
  Desde aquí sólo puedo decirte una cosa: tal como yo lo veo...
basándome en ti... y viéndolos a ellos... eres una madre maravillosa.)

sábado, 21 de marzo de 2015

Perdida Por Ti

Al Poeta Antonio Machado




Se me pude ver caminar, serena y descalza,
por las calles de una Xàtiva eterna y calina;
una persona perdida en el tiempo, que se alza,
una mujer perdida en mis tiempos, que camina.

Cae el crepúsculo sobre la tierra mojada,
imágenes y magia, por ti, a mí regresan
acompañándome por mi alameda estimada
y el enigma de tu alma querida me confiesan.

Tú, Luz inspiradora, que a este fuego desarma,
por quien deseé ser Poeta, para sentir...
por una vez... lo que tú sentías, fuerza y calma.

Piso ...rask... la hierba y, palpitante, vuelvo a latir
haciendo estremecer lo más profundo del Alma;
te escucho en las hojas ... rask... rask... Y seguir... seguir...

® Lucía Navarro Luna

jueves, 19 de marzo de 2015

El Teu Cor Al Nostre Cor (Tu Corazón En Nuestro Corazón)

A Pele Navarro Ferrero

Com expressar-te el regal que suposa
que sempre estàs al nostre costat?
És tan encantador veure’t brillar els ullets
quan les coses ens van bé,
com angoixós veure’t patir
quan ens preocupa algún revès.

Caminar per la vida de vegades és difícil.
No sempre tot és bo.

No obstant
ajuda tant...
que ens permetes transitar,
errar i encertar,
sense sentir-nos mai sols.

Xiquetes afortunades
les que et tenen per uelo.
El millor de tot,
i això elles ho sabràn
si es que, al igual que Luk,
no ho saben ja,
és el teu cor,

el teu cor al nostre cor.

® Lucía Navarro Luna






(Traducción: TU CORAZÓN EN NUESTRO CORAZÓN
¿Cómo expresarte el regalo que supone que siempre estás a
nuestro lado?
Es tan encantador verte brillar los ojitos cuando las cosas nos
van bien, como angustioso verte sufrir cuando nos preocupa algún
revés.
Caminar por la vida a veces es difícil. No siempre todo es bueno.
No obstante, ayuda tanto... que nos permitas andar, equivocarnos
y acertar, sin sentirnos nunca solos.
Niñas afortunadas las que te tienen por abuelo. Lo mejor de
todo, y eso ellas lo sabrán si es que, al igual que Luk, no lo saben ya,
es tu corazón,
tu corazón en nuestro corazón.)

domingo, 8 de marzo de 2015

Soy Mujer

Soy Mujer

      Psicóloga de tu dolor
      cuando sientes resquebrajársete el alma,
      albañil de corazones
      en tanto que no acude a tu encuentro esa calma,
      sosegada y distendida,
      con la que ha de recibirte, abnegada, tu cama.
      Maga de texturas y sabores,
      asomo la cabeza entre los fogones,
      para contarte de nuevo
      ‘El Príncipe y Su Dama’,
      nuestro cuento desgastado
      por mis lágrimas y tus dedos,
      que todavía me pides, chispeante,
      mientras el agua de la bañera te abraza.

Soy Mujer

      No he de demostrar al mundo nada,
      sino a mí misma
      por el placer de sumergirme en mi propia magia.

He nacido mujer...

      ... para probarme en la arena,
      en el tacón y en la bota de trabajo,
      bajo el sol y con la luna;

      ... para sentir este cuerpo
      repleto de emociones,
      en el vaivén vertiginoso e incierto
      de una vulnerable barca,
      cobijo y amparo
      de esta alma cansada
      a un chasquido de renacer
      cada mañana, a la luz que irradia tu mirada.

Hijo mío,

      ignoras todavía cómo me duele
      una sola de tus lágrimas.
      Ellas... que te hacen superar cada limitación
      de esta sociedad vetusta y perpetuada,
      la que se autocree y pretende convencer
      de que sin una mujer a tu lado no podrás hacer nada.

Podrás y Puedes.

      Ámala si así te nace,
      tan sólo por ser quien Es,
      jamás porque creas necesitarla.
      Has llegado a mis brazos provisto
      de todo cuanto vayas a poder precisar
      en cada paso acontecido
      en los senderos y recodos de tu camino,
      el cual irás descubriendo, y yo contigo, al caminar.

      No puedo prometerte
      vestiduras jamás rajadas.
      Sí, en cambio, siempre para ti
      mi mejor abrazo todas las mañanas.


® Lucía Navarro Luna


lunes, 23 de febrero de 2015

El Estilo De Un Ángel

A Ismael H

Sé que me lees,
y ahora también que me entiendes

me
mi
ras

me
ves

me
o
yes

me
es
cu
chas

y por tu inmensa sonrisa
resplandece el cielo en el aula.

Tu grandeza
arrebata mi pequeñez.
Y, como en un cuento,
al atardecer,
me enseñas cómo superar
mis propias limitaciones,
llevándome a situaciones límite
para envolverme en la luminosidad
de tus ojos chispeantes
en los míos soñadores.

Eres dueño de un estilo
al que el ritmo pide permiso.

Marcas con tu amor
que, tan inmenso como fuerte,
dentro de tu pequeño cuerpo

te
des
bor
da
y desbordas
por su intensidad.

Sabes que te quiero,
que tus ojos son mi luz
y su brillo disuelve
las espinas de mi camino,
que cuando me miras así...
así... como jamás nadie me ha mirado,
con la pureza de la mirada limpia
y la transparencia del Amor,
Soy yo quien sabe
que también el Cielo me quiere,
y es que contigo me ha sonreído,

eres el ángel de alas transparentes
que con su dulzura me ha redimido.

® Lucía Navarro Luna

sábado, 14 de febrero de 2015

Leyenda


A Antonio Monzonís Guillén


Antonio

Maestro
Leyenda
Amigo

Me busco en las letras de tu nombre,
te escribo para sentirte en cada grafía,
para arroparme con tu sonrisa
en cada palabra que mantiene en pie
mi pluma,
abstraída y danzarina
por los jardines del viejo cauce
de nuestro amado Turia,

algazara de soñadores
y vergel de afortunados,
de damiselas con corazón flamante
resguardado bajo el embrujo
del brillo de su peineta;
de galanes encandilados
enfundados en su fajín,
cobijando sus pensamientos preocupados
en un silencio, ornamentado
de guiños, piropos e incitaciones
con el fin
de soportar sus propias palpitaciones
en la espera extasiante
de la reacción de su ‘reineta’.

Maestro
Leyenda
Amigo

De tu mano vi otro mundo
de caminos encantados,
de imposibles encontrados,
donde tu dolor 
también en mí rasgó el espacio.
Me duelen tus espinas, Amigo,
a pesar de –o tal vez por eso- 
que las guardas sólo para ti,
dedicándome la confortabilidad del tallo
y la suavidad de los pétalos.

Maestro
Leyenda
Amigo

¿Qué puedo decirte
                     si tú siempre vas conmigo?

Que te extraño cada día,
                         aunque nunca te lo digo.


® Lucía Navarro Luna


domingo, 11 de enero de 2015

Mi Edad, Ese Tiempo Arbitrario

 
Llevo impresa mi edad
en cada resonancia de mi Alma,
donde sólo yo sé cómo me siento
a primera hora de la mañana.

Tengo la luz impregnada en las venas,
y la sabiduría a merced
de lo que el silencio quisiera darme;
la fluidez de los ríos manando en mí,
libremente;
la rudeza de los montes
y la suavidad de los valles,
en los montículos, bajo la piel,
tras unos senos oscilantes.

Soy  el águila que planea
en la inmensidad del cielo,
extensión de un espacio
eternamente cambiante y siempre abierto.

Soy el eco del suicidio
que ha abrazado seguir viva,
con el corazón vibrante
bombeando sangre enardecida.

Soy las manos de tus bolsillos
acariciando un botón olvidado,
un pañuelo que sale en tu auxilio
y una moneda de cambio.

Vengo de un lugar llamado miedo,
donde sobrevivir, a veces, te perseguía.
Sin tiempo para pensar, vibrar ni sentir...
atrapada en el interior de ese demencial reloj
en el que le faltaban horas al día

               ( y días a la energía).


Más allá de la Edad que una persona asegura,
un cuerpo delata
o un documento confirma...

estoy más allá de la Edad
que mi Alma manifieste
según el puente que atraviese
o el momento concreto del día.

Soy de un lugar llamado Amor.
Lo he recordado... mientras venía.





® Lucía Navarro Luna



miércoles, 7 de enero de 2015

Te Me Vas...


A Ricardo Martínez Vidal
mi tio
 en sus últimas horas



                                     Anochece...
                                    esta tarde de frío enero
                                    en la que tu alma se me escapa entre los dedos.
                                    Te me vas
                                      y mis recuerdos no te alcanzan,
                                     te me vas...
                                     este presente no nos basta.
                                     Cae el telón,
                                      las luces se apagan,
                                      anochece...
                                      y tu alma se me escapa.

 ® Lucía Navarro Luna


Para entender algunas palabras, como telón... o luces... cabría leer 'Tu mano en mi mano', un poema que escribí para él transitando su experiencia con el Alzheimer y la nuestra con todo ello. Se encuentra publicado en la página 268 del poemario 'Puente de Fuego'